¡Recordemos! Según el glosario de términos del D.S. 005-2012-TR Reglamento de la ley N° 29783 Ley de Seguridad y salud en el trabajo, un accidente de trabajo es todo suceso repentino que sobrevenga por causa o con ocasión del trabajo; y que produzca en el trabajador una lesión orgánica, una perturbación funcional, una invalidez o la muerte. También se considera accidente de trabajo a aquel accidente que se produce durante la ejecución de órdenes del empleador o durante la ejecución de una labor bajo su autoridad, aún fuera del lugar y horas de trabajo. |
![]() |
Los accidentes de trabajo con lesiones personales, según su gravedad, se clasifican en:
|
Accidente Leve: Suceso cuya lesión, resultado de la evaluación médica, genera en el accidentado un descanso breve con retorno máximo al día siguiente a sus labores habituales. |
![]() |
Accidente Incapacitante: Suceso cuya lesión, resultado de la evaluación médica, da lugar a descanso, ausencia justificada al trabajo y tratamiento. Para fines estadísticos, no se tomará en cuenta el día de ocurrido el accidente. Según el grado de incapacidad los accidentes de trabajo pueden ser:
|
![]() |
Accidente Mortal: Suceso cuyas lesiones producen la muerte del trabajador. |
En distintas partes del mundo, muchos profesionales opinan que tanto el día de la semana como el momento de la jornada tienen una relación muy importante; es así que creen que el lunes es un mal día para trabajar. Por ejemplo, en el sector del automovilístico, existe la certeza de que los autos fabricados ese día tienen un índice de averías mucho más alto de lo tradicional. Algo muy similar pasa con los accidentes de trabajo, cuya probabilidad de sufrirlos es directamente proporcional al inicio de la semana; y también al inicio de la jornada de trabajo.
Iniciar con el trabajo, después de un fin de semana de descanso, es tan duro que el organismo humano tarda un tiempo en adaptarse al trabajo mismo y a los peligros que éste lleva. Según estadísticas, el hecho de que en el primer día de la semana se produzcan el 23,3% de los accidentes de trabajo y que esta cifra vaya descendiendo paulatina y regularmente hasta el viernes en que ocurre el 16,36%, no parece ser otra la explicación.
Asimismo, de acuerdo a las estadísticas, los sábados y domingos se registran el 4,44% y el 2,35% de los contratiempos, respectivamente, pero es muy difícil saber cuál es la incidencia real sobre la actividad desarrollada, dado que no hay muchas cifras sobre las personas que trabajan durante el fin de semana, donde el trabajo productivo es mucho menor.
La teoría de que es necesario un tiempo de adaptación al riesgo del puesto de trabajo, parece también la explicación de que sea en las primeras horas de la jornada cuando más siniestros tienen lugar. Para este caso, no es la primera hora la de más riesgo, pero sí la segunda, para ir disminuyendo hasta el final de la jornada; sin embargo, el hecho de que la primera hora no sea la que registre más siniestros puede deberse, según algunos especialistas, a que en parte esa primera hora es destinada a los preparativos previos al inicio de la producción, es decir, dirigirse al área de trabajo, planificación de tareas, encendido de máquinas, entre otras tareas, que suponen un riesgo menor, lo cual confirmaría la teoría de que el peligro disminuye a medida que el trabajador se integra en su tarea. Por otro lado, se debe considerar que el repunte de accidentes de trabajo se produce en la sexta hora y ello puede deberse a la reanudación de la jornada tras la parada para el refrigerio, que es cuando el estado de relajación propio de las personas impide que los sentidos estén todo lo alerta que exige la seguridad.
Las estadísticas no facilitan la hora en que se producen el 100% de los accidentes de trabajo, quizás por no disponer de datos, o porque ocurran después de la octava hora de actividad. El cansancio podría ser la razón de muchos de esos accidentes en que no figura la hora en que se producen. Se conoce que, tras muchas horas de actividad, ni la capacidad de atención ni los reflejos son los mismos que cuando uno está descansado. | ![]() |
![]() |
Finalmente, las estadísticas también revelan que las causas de los accidentes, en más de una tercera parte, se deben a sobreesfuerzos; las posibilidades de un contratiempo por otras causas disminuyen mucho, ya que el siguiente riesgo en la lista es el de recibir golpes con objetos y herramientas, que producen el 16% de los accidentes. Las caídas al mismo nivel, ser atrapado entre objetos y las caídas a distinto nivel siguen en la lista de causas. |